La cantante mexicana Dulce María, del grupo juvenil RBD, afirmó que le gustaría subastar por Internet entre sus fans las ilustraciones originales de su libro “Dulce amargo”, a beneficio de alguna organización de las mujeres indígenas.
“No soy una gran pintora, simplemente plasmo lo que yo siento, trato de expresarme”, dijo la artista en la presentación a los periodistas del libro, publicado por Editorial Televisa.
Dulce María explicó que el libro contiene “pedazos” de sus ilustraciones, que tiene más dibujos de los que aparecen en la obra y que espera contribuir a la causa de las mujeres indígenas con lo que se recaude, “sea mucho o poquito”.
En la misma rueda de prensa los responsables de la editorial se refirieron también a la polémica venta por Internet de fragmentos del libro antes de que éste fuera publicado, extraídos ilegalmente de la cuenta de correo electrónico de la artista.
Según Televisa, el ilícito se habría cometido desde España y se está buscando aún al autor del mismo.
“Dulce amargo” sale a la venta en México con una tirada de 50.000 ejemplares.
Televisa planea distribuirlo también en las próximas semanas en Argentina, Colombia y Venezuela.
Más adelante prevé editarlo en Estados Unidos, traducido al inglés, y en Brasil, aunque se estudia aún si será un texto en portugués.
El libro, “que es como un espejo” de sí misma, según la autora, recopila una serie de escritos personales, poemas, ilustraciones y canciones inéditas de Dulce María realizados durante su vida como artista.
En él se habla de amor, desamor, falsedad, madurez y esperanza, entre otros sentimientos.
“Quiero dar ese mensaje de que todos tenemos problemas, de que todos tenemos momentos en los que ya no puedes más y que siempre se puede salir adelante”, apuntó la joven cantante, que dijo querer compartir tanto sus momentos “increíbles” como los difíciles.
“Quiero dar ese mensaje de que todos tenemos problemas, de que todos tenemos momentos en los que ya no puedes más y que siempre se puede salir adelante”, apuntó la joven cantante, que dijo querer compartir tanto sus momentos “increíbles” como los difíciles.
Dulce María reveló que escribe para sí misma desde los 11 años, “como terapia” y que ello le sirve para entenderse.
Aunque no se imaginó que escribiría un libro, consideró que mientras se está vivo “hay que hacer de todo”.
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