Hace cuatro años inició un concepto que hasta el día de hoy no conoce límites ni fronteras. El productor Pedro Damián tuvo la idea de readaptar en la pantalla chica mexicana las historias de un puñado de jóvenes, quienes a través de una telenovela exponían algunas de las situaciones que vivían día con día tanto en el colegio como con su entorno amoroso, fraternal y familiar. La respuesta del público superó todas las expectativas, así que la oportunidad de traspolar ese concepto televisivo en uno musical no se podía desaprovechar, teniendo el pretexto ideal la historia del melodrama. Así se delimitó lo que hoy se conoce en el mundo como RBD, agrupación conformada por Anahí Puente, Dulce María Espinoza, Maite Perroni, Christian Chávez , Alfonso Herrera y Christopher Uckerman.
Este fenómeno mediático, que existe desde 2004, ha hecho que el sexteto juvenil esté siempre presente en los diversos medios de comunicación tanto de México como del extranjero, sirviéndoles esto como una gran plataforma que les ha abierto a cada uno de sus integrantes diversas opciones laborales en el terreno individual. Ante este panorama, cinco chicos de RBD comentaron en entrevista para Excélsior lo siguiente: “Creo que es enriquecedor tener la posibilidad de hacer otras cosas de forma personal. Son otras maneras interesantes de crecer en el terreno de lo individual.
Eso es muy importante porque cuando terminamos un proyecto personal regresamos al grupo con una retroalimentación muy padre que nos permite crecer como seres humanos”, dijo Christian Chávez. “Siempre he creído que debemos vivir al máximo porque vida sólo hay una. No sabemos dónde vamos a estar el día de mañana y por eso es importante que cada uno cumpla sus sueños. Yo recuerdo que un día les dije: ‘Chavos, quiero abrir una tienda y que mis dibujos se vendan’. Y todos me apoyaron para que lo hiciera realidad”, declaró Anahí. “Estar en nuevos proyectos es un proceso normal que se desencadena gracias a que nos está yendo bastante bien. Es una gran oportunidad poder estar en diferentes áreas y los disfruto mucho, pero eso implica hacer varios sacrificios como estar lejos de tu familia o tus amigos durante varias temporadas”, manifestó Alfonso Herrera. “Los seis somos muy distintos y tenemos sueños diferentes.
El hecho de que cada uno tenga ciertos intereses nos permite seguir retroalimentándonos y hacer que el grupo se mantenga fresco, pues se da quehay grupos en donde alguno de los integrantes empieza con proyectos personales y todo el grupo se empieza a desmembrar”, opinó Dulce María. “Todos tenemos proyectos personales. Al principio era muy pesado combinarlos porque era estar en la telenovela, cumplir con las giras y con las diversas cosas que nos salían en el camino. Ahora ya es más fácil, pues hemos adquirido más experiencia para mezclar y adaptarnos”, señaló Christopher Uckerman.
Anahí
Esta ojiazul inició su carrera a los dos años cuando participó en el programa Chuiquilladas. Después de haber actuado en diferentes melodramas y tener una carrera como solista, en 2002 se integró al equipo de Pedro Damián en la telenovela Clase 406.
Dos años más tarde se le invitó a participar en la telenovela Rebelde en donde interpretaba a Mia Colucci. A partir de este momento su vida se transformó a tal grado de lanzarse como empresaria y abrir una tienda en un centro comercial de Interlomas en donde se vende ropa y accesorios con el sello de Anahí. La ganadora de un Premio Ariel por su actuación en la cinta Había una vez una estrella (1991), confesó que uno de sus sueños frustrados es el de la producción y no descarta incursionar en el ámbito con un proyecto musical y teatral que vaya enfocado a las niñas.
Al fonso Herrera
Su incursión en el medio del entretenimiento se dio cuando el director Fernando Sariñana lo incluyó dentro del reparto de la película Amar te duele al lado de figuras como Martha Higareda, Ximena Sariñana y Luis Fernando Peña. De ahí le surgió la invitación para ser parte de la telenovela Clase 406 de Pedro Damián y dos años más tarde el proyecto doble de RBD. Gracias a Rebdelde le han llovido propuestas en el plano cinematográfico y televisivo. Hace unos meses terminó de filmar como protagónico la película Volverte a ver en donde encarna a un publicista y durante una temporada fue parte de la obra teatral The pilowman, misma en la que le dio vida a un retrasado mental. A finales de julio se integrará al elenco de la serie televisiva Terminales, en donde compartirá créditos con Ana Claudia Talancón.
Christian Chávez
Antes de ser parte de RBD, Christian Chávez tuvo una participación en el melodrama El juego de la vida. De ahí se integró al proyecto de Clase 406 dándole vida a Fercho. De ahí saltó a RBD y se fue perfilando para nuevas propuestas de tipo teatral en el plano personal. Este tamaulipeco de 24 años tuvo algunas actuaciones especiales en la obra de Nacho Cano Hoy no me puedo levantar, proyecto en el que le dio vida a Colate. Después de esta incursión en el teatro fue invitado a participar en la puesta en escena de Avenida Q, en donde le dio vida a dos marionetas: Eugenio, un universitario desempleado y a Rodri.
Maite Peroni
Estudió en el Centro de Educación Artística y se graduó en 2003. Inició su carrera en puestas teatrales como Los enamorados o Usted tiene ojos de mujer fatal. Un año después obtuvo el papel de Lupita para el proyecto televisivo de RBD. Después del éxito adquirido, la actriz de 25 años aceptó la oferta de protagonizar la telenovela Cuidado con el ángel al lado de figuras como el cubano William Levy, Elena Rojo, Laura Zapata, Nailea Norvind, Rocío Banquells y Ricardo Blume. En este melodrama, Perroni interpreta a Mirichuy, una joven mujer que busca el bienestar de los demás. Gracias a su belleza, Maite es parte de una imagen de cosméticos de gran renombre mundial.
Christopher Uckerman
De padre mexicano y madre sueca, este joven de 21 años inició su carrera desde los dos años. Su trayectoria empezó a tomar auge cuando dejó su huella en la telenovela El diario de Daniela. También estuvo en Amigos por siempre y además de actuar en Aventuras en el tiempo, escribió el tema musical. Su gran oportunidad llegó en 2004 cuando tuvo que encarnar el personaje de Diego Bustamante, el hijo de un político (Enrique Rocha) en Rebelde. Desde entonces Uckerman se ha dedicado a estudiar música; con sus amigos montó una empresa de joyería y en algunos meses empezará a escribir un libro sobre RBD
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